Departamento de Liturgia del Arzobispado de Santiago
 
 
 
Eucaristía del Martes 03 de Septiembre de 2024
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Martes de la vigesimosegunda semana del tiempo ordinario

San Gregorio Magno, papa y doctor de la Iglesia

Memoria obligatoria 

Color: blanco

El Papa Gregorio Magno (540-590) gobernó la Iglesia durante catorce años. A pesar de su salud deteriorada, realizó una obra considerable: como “servidor de los servidores de Dios”. Debió proveer al abastecimiento de Roma, mientras enseñaba al pueblo y preparaba la evangelización de los pueblos bárbaros asentados en las Galias (Francia) y en Inglaterra.

En sus escritos teológicos y espirituales, de notoria influencia en la vida de la Iglesia, manifiesta su celo en hacer llegar a todos la luz del Evangelio.

Antífona de entrada 

El bienaventurado Gregorio, elevado a la cátedra de Pedro, buscaba siempre el rostro del Señor, y permanecía en la contemplación de su amor. 

ORACIÓN COLECTA 

Señor Dios nuestro, que cuidas a tu pueblo con misericordia y lo gobiernas con amor, por la intercesión del Papa san Gregorio concede el espíritu de sabiduría a quienes encomendaste la conducción de tu rebaño, y haz que la santidad de los fieles sea el gozo eterno de sus pastores. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. 


PRIMERA LECTURA

El hombre puramente natural no valora lo que viene del Espíritu de Dios. El hombre espiritual todo lo juzga.

Lectura de la primera carta del Apóstol san Pablo a los cristianos de Corinto  2, 10b-16

Hermanos:

El Espíritu lo penetra todo, hasta lo más íntimo de Dios. ¿Quién puede conocer lo más íntimo del hombre, sino el espíritu del mismo hombre? De la misma manera, nadie conoce los secretos de Dios, sino el Espíritu de Dios. Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que viene de Dios, para que reconozcamos los dones gratuitos que Dios nos ha dado. Nosotros no hablamos de estas cosas con palabras aprendidas de la sabiduría humana, sino con el lenguaje que el Espíritu de Dios nos ha enseñado, expresando en términos espirituales las realidades del Espíritu.

El hombre puramente natural no valora lo que viene del Espíritu de Dios: es una locura para él y no lo puede entender, porque para juzgarlo necesita del Espíritu. El hombre espiritual, en cambio, todo lo juzga, y no puede ser juzgado por nadie. Porque ¿quién penetró en el pensamiento del Señor, para poder enseñarle? Pero nosotros tenemos el pensamiento de Cristo.

SALMO RESPONSORIAL    144, 8-14

R/. El Señor es justo en todos sus caminos.

El Señor es bondadoso y compasivo, lento para enojarse y de gran misericordia; el Señor es bueno con todos y tiene compasión de todas sus criaturas. 

Que todas tus obras te den gracias, Señor, y tus fieles te bendigan; que anuncien la gloria de tu reino y proclamen tu poder.

Así manifestarán a los hombres tu fuerza y el glorioso esplendor de tu reino: tu reino es un reino eterno, y tu dominio permanece para siempre. 

El Señor es fiel en todas sus palabras y bondadoso en todas sus acciones. El Señor sostiene a los que caen y endereza a los que están encorvados. 

ACLAMACIÓN AL EVANGELIO   Lc 7, 16

Aleluya.

Un gran profeta ha aparecido en medio de nosotros y Dios ha visitado a su Pueblo. Aleluya.

EVANGELIO

Sé quién eres: el Santo de Dios.

+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas   4, 31-37

Jesús bajó a Cafarnaúm, ciudad de Galilea, y enseñaba los sábados. Y todos estaban asombrados de su enseñanza, porque hablaba con autoridad.

En la sinagoga había un hombre que estaba poseído por el espíritu de un demonio impuro; y comenzó a gritar con fuerza: “¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido para acabar con nosotros? Ya sé quién eres: el Santo de Dios”.

Pero Jesús lo increpó, diciendo: “Cállate y sal de este hombre”.  El demonio salió de él, arrojándolo al suelo en medio de todos, sin hacerle ningún daño. El temor se apoderó de todos, y se decían unos a otros: “¿Qué tiene su palabra? ¡Manda con autoridad y poder a los espíritus impuros, y ellos salen!”

Y su fama se extendía por todas partes en aquella región.


ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS 

En la fiesta de san Gregorio, te pedimos, Señor, que sea de provecho para nosotros este sacrificio, por el cual quisiste borrar los pecados del mundo Por Jesucristo, nuestro Señor. 

Antífona de comunión:        Cf. Lc 12, 42 

Éste es el administrador fiel y previsor, a quien el Señor ha puesto al frente de su casa para distribuir la ración de trigo en el momento oportuno. 

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN 

Te pedimos, Padre, que a tus hijos alimentados con Cristo, Pan de vida, también los instruyas por Cristo, verdadero Maestro, para que, en la fiesta de san Gregorio, reciban tu verdad y la realicen en el amor. Por Jesucristo, nuestro Señor. 


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