Departamento de Liturgia del Arzobispado de Santiago
 
 
 
Comentario - Eucaristía del
- A
+ A

En el evangelio de hoy, al igual que en otros pasajes, los fariseos quieren poner a prueba a Jesús. Y esta vez lo hacen con un tema que es muy complejo, pues toca la vida más íntima de las personas y de las familias: la pregunta acerca del divorcio.

Ante esto, Jesús invita a mirar no sólo la doctrina de Moisés, sino que invita a mirar el plan divino de la creación. Moisés aceptó el divorcio, que era una situación que ya se daba en esa y otras culturas, pero hace exigir el acta de divorcio, de manera que la mujer no quede desprotegida frente a él. Pero Jesús reconoce que tras esto está el corazón del hombre que se ha endurecido. Pues la condición primera y querida por Dios, es el amor incondicional y definitivo entre dos personas: que el hombre no separe lo que Dios ha unido.

Cristo invita a mirar la creación: hombre y mujer los creó. Lo humano se da de forma diversa en lo femenino y en lo masculino. Todas las otras distinciones son marginales: linda o fea, inteligente o no, blanco o negro… Este es el diseño del Creador y tiene pleno sentido en la complementariedad entre ellos. Dios no nos creó autosuficientes. Desde el origen el hombre ha sido concebido como un ser necesitado del otro para alcanzar la plenitud, de manera que hemos sido creados para dar y recibir amor.

La sexualidad no es un juego, y requiere de mucho esfuerzo y paciencia para poder construir el amor según el diseño de Dios. Claramente esto es muy difícil. La experiencia nos muestra que en muchas situaciones este intento falla por diversos motivos. Lo primero es que Dios conoce nuestras fragilidades y nosotros no podemos ser jueces de nadie. Muy por el contrario, debemos acoger, acompañar, discernir e integrar, como tan claro lo plantea el Papa Francisco en Amoris Laetitia. Como miembros de la Iglesia que somos todos, debemos procurar que todos, pero en especial aquellos que sufren en su situación matrimonial y familiar, se sientan especialmente acogidos en el seno de nuestra comunidad para que puedan salir adelante y vivir la vida divina que el Señor nos ofrece a todos.


  • Catedral 1063, local 503, Santiago

    Teléfonos: +56 2 3278 0733 - +56 2 3278 0734

    Desarrollado por Iglesia.cl